"La pintura, ir al turf, ir a jugar al tenis, yo no lo hago. Mi hobby, mi vocación, es la medicina. Y si mañana me dicen: 'Usted no puede trabajar en la medicina, señor presidente', yo lo voy a hacer como hobby. Créame que la mayor parte de mi actividad médica la hago como hobby."
Tabaré Vázquez, "Código País" de Teledoce, lunes 12.

Un hobby bastante rentable tiene el presidente Vázquez, que gana $135 mil por despuntar ese vicio en sus ratos de ocio. Es que con el poco tiempo que le dejan sus obligaciones, como salir a pescar en Anchorena, y tener que bancarse hacer de presidente un par de días a la semana, hay que distenderse un poco de vez en cuando.

Además, como el doctor es el dueño de la pelota, y también es el que elige a sus amiguitos para jugar con él...

Puso a Pedro Kasdorf como coordinador de Radioterapia Pública y director del Servicio de Radioterapia del Instituto Nacional del Cáncer. Kasdorf fue socio de Vázquez en la clínica COR, donde él trabaja, y de la que fue fundador y es cuasi dueño. Kasdorf hace unos años se mandó una diablura y perdió en la calle un pedazo de material radioactivo que terminó siendo escudriñado por unos niños. También de esa clínica metió por ahí a los amigos Torres y Luongo y puso a Blanca Tasende como directora del Departamento de Radioterapia y Lucha contra el Cáncer del Pereira Rossell.

Además, Roberto Silva, el esposo de María Julia Muñoz, la ministra de Salud Pública, fue nombrado presidente de una comisión de lucha contra el diabólico tabaco y el médico personal de Vázquez, Mario Zelayarrán, es director de la Comisión Honoraria para la Salud Cardiovascular. También a su mujer María Auxiliadora, el presidente la puso a presidir una comisión de salud bucal. Y acomodó a un pseudoempresario mafioso dueño de una revista berreta chupamedias del gobierno, llamado Alberto Grille, en una comisión honoraria de la Colonia Etchepare.

Jugando entre amigos, sin duda es más divertido. Este gobierno del cambio también resultó ser un gobierno divertido.