martes, noviembre 28, 2006
No te banco (I)
Me es imposible contener un odio visceral e inmediato hacia ellos. Los que se suben al ómnibus interdepartamental y en seguida reclinan todo lo posible su asiento dejando mi cuerpecito de 1,91 comprimido por todo el viaje merecen una muerte lenta y dolorosa, por más que no tengan la culpa.
5 Comments:
Anonymous Anónimo said...
Pues reserva en la primera fila....

Anonymous Anónimo said...
Bien, dadas las dimensiones se puede aplicar la siguiente ecuación: reclina asiento = clava rodilla en espalda. No hay derecho a reclamo.

Blogger Roberto said...
El problema creo que es solo de Copsa, porque yo suelo subir a ese tipo de buses y no tengo problema en ninguno salvo en Copsa que te dan un espacio de 10 cm entre tu asiento y el de adelante, y tienen el plus de que son reclinables.

Blogger Kily said...
Analista: no siempre se puede elegir fila y asiento cuando uno reserva de un día para otro.

Quake: en ese tipo de asientos la rodilla en la espalda no se siente, al menos no tanto como el asiento en la rodilla. Además, nunca dije que mi reclamo fuera justo y racional.

Robert: era un interdepartamental de Agencia Central, y yo mido 1,91.

Saludos.

Anonymous Anónimo said...
Alguien se acurda aun de este blog desactualizado? Kily, arrancá!