
Desde que lo adquirí, el domingo, no paro de escuchar el nuevo disco de los
Buenos Muchachos. Es impresionante, tal vez mejor que el anterior (Amanecer Buho), que también estaba bárbaro y sacó algún que otro premio.
Son diez canciones voladoras con letras increíbles y climas alucinógenos. Me gusta de Buenos Muchachos que son una banda que genera un profundo rechazo a la mayoría de la gente. Y a mí me parecen, junto al Cuarteto, lo mejor del rock uruguayo. Nada que hacer tienen los fumetas de trompetitas que tanto proliferan.
Los Buenos Muchachos son algo así como Tom Waits cantando en Radiohead. La voz cirrótico-arrabalera de Pedro Dalton la odiás o la amás. Yo pasé de lo primero a lo segundo en poco tiempo. Los arpegios y punteos de guitarra, unos sobre otros, arman unas paredes hipnóticas ("¿Qué hacés Joao?"). Tienen un par de estribillos pegadizos en "Y la nave va..." y "Milagros", lo más pop del disco, y hay partes cuasi épicas ("Cambió el cuarto").
Se llama
Uno por uno y así sucesivamente. Por enésima vez lo estoy escuchando y ya lo postulo como lo mejor del año, muy peleado con "Raro", del Cuarteto.